Contaminación
|
La humanidad, siendo la única especie capaz de ejercer su dominio
sobre el medio, y a su vez la que posee el potencial de conocer y entender
los fenómenos de la naturaleza; siendo además, la única que puede idear
soluciones a los problemas que ella misma genera. Es, paradójicamente,
protagonista de un desequilibrio ambiental mundial sin antecedentes, generado
por la producción incontrolable de sustancias tóxicas y residuos artificiales
de alta permanencia. La cruda realidad ambiental que nos rodea no es más que
el resultado de una sociedad consumista donde la balanza favorece a las
industrias, al comercio y a la moda, más que a la salud
AGUA
Ríos y Lagos
La ONU estima que dos terceras partes de la humanidad están en riesgo de
sufrir de sed dentro de los próximos treinta años. De acuerdo a la
Organización Mundial de la Salud, se considera que un agua está polucionada
cuando su composición o su estado están alterados de tal modo que bajo esas
condiciones no pueden ser empleadas para los diferentes usos que pueden
hacerse en su estado natural (1961). Estas alteraciones pueden darse sobre
las propiedades físicas, biológicas y químicas del agua, disminuyendo así su
potabilidad para el consumo humano y su potencial de uso para actividades
agrícolas o industriales.
En el país, una de las principales fuentes de contaminación de agua es la
evacuación directa de aguas residuales, ya sea provenientes de las
residencias, de fábricas, de minas u otros. Las sustancias más peligrosas
provienen fundamentalmente de los residuos tóxicos, reactivos, inflamables y
combustibles que produce la minería, la industria manufacturera,
particularmente la industria del procesamiento del petróleo, la industria
química y la industria de curtiembres (IDEAM, 1998). La industria alimentaria
y de bebidas participan activamente en el aporte diario de 688 toneladas de
materia orgánica e inorgánica a los ríos del país.
El incremento en el agua de sulfuros, amoníaco, nitratos y sustancias ácidas,
por efecto de vertimiento ya sea de origen agrícola, industrial o
residencial, puede ocasionar diversas enfermedades tras su consumo (elevadas
cantidades de nitratos y cloruros por ejemplo, están relacionados con
metahemoglobinemia infantil y fluorosis endémica crónica respectivamente).
También cabe resaltar la presencia, cada vez más habitual de compuestos
hidrocarburados y elementos como mercurio, plomo, cobre, zinc, selenio y
cadmio. El agua contaminada transporta bacterias, y larvas de nemátodos que
ocasionan diversas enfermedades gastrointestinales y respiratorias los
animales y al hombre.
|